Causas de la esclerosis múltiple Los científicos no saben con certeza cuál es la causa de la esclerosis múltiple. Piensan que una combinación de factores desencadena la enfermedad. Los estudios respaldan la opinión de que algún factor ambiental podría ser la causa de la esclerosis múltiple en ciertas personas con una combinación específica de genes. El factor desencadenante afecta una combinación específica de genes en esas personas. Los genes portan características heredadas de los padres. Las investigaciones también indican que el origen étnico y la ubicación geográfica desempeñan una función. Para identificar la causa de la esclerosis múltiple, los estudios se enfocan en: immunología - el estudio del sistema inmunitario, epidemiología - el estudio de los patrones de enfermedad en grandes grupos de personas, genética - información sobre genes que quizá funcionen de manera indebida en las personas con esclerosis múltiple y agentes infecciosos - virus que pueden contribuir a la esclerosis múltiple. Un entendimiento de las causas de la esclerosis múltiple acelerará el proceso de descubrir tratamientos más eficaces y, a fin de cuentas, la cura . Lo ideal sería encontrar la manera de prevenir la esclerosis múltiple para comenzar. Factores inmunológicos y la esclerosis múltiple Con la esclerosis múltiple, una respuesta inmunitaria anormal causa inflamación. Esta inflamación daña el sistema nervioso central. En la respuesta inmunitaria anormal participan varios tipos de células. Dos tipos importantes de células inmunitarias son las células T y B: Las células T se activan en el sistema linfático. El sistema linfático es parte del sistema inmunitario. Incluye la médula ósea, el timo y los nódulos linfáticos. Con la esclerosis múltiple, las células ingresan al sistema nervioso central por medio de los vasos sanguíneos. Una vez allí, las células T producen sustancias químicas que causan inflamación y daño. Esto resulta en daño a las fibras nerviosas, la mielina y las células que la producen. La mielina es la capa aislante que recubre los nervios. Las células T también ayudan a activar las células B y hacen que otras células del sistema inmunitario participen en un ataque inmunitario. Los linfocitos T reguladores son un tipo de célula T. Con la esclerosis múltiple, no funcionan debidamente ni suprimen la inflación. Las células T citotóxicas o “asesinas” atacan y destruyen directamente las células con ciertas características. Las células B se activan con la ayuda de las células T. Las células B producen anticuerpos y estimulan otras proteínas. Los anticuerpos son las proteínas que combaten las infecciones o sustancias anormales. Con la esclerosis múltiple, estas causan daño en el sistema nervioso central. Los investigadores continúan buscando otras células y procesos que quizá contribuyan a la esclerosis múltiple. Quieren obtener más información sobre qué activa el sistema inmunitario con la esclerosis múltiple y cómo retrasarlo o detenerlo. Factores ambientales de la esclerosis múltiple Aunque se desconoce la causa de la esclerosis múltiple, estamos averiguando más sobre los factores ambientales que contribuyen al riesgo de tener la enfermedad. No existe un solo factor de riesgo que provoque la esclerosis múltiple. Los investigadores creen que varios factores contribuyen al riesgo general. Factores geográficos y la esclerosis múltiple El diagnóstico de esclerosis múltiple es más frecuente en las regiones más alejadas del ecuador. Para entender por qué, los epidemiólogos analizan muchos factores. Los epidemiólogos son científicos que estudian los patrones de enfermedad en grupos numerosos de personas. Observan variaciones en: Por ejemplo, un estudio indica que la explicación de la mayor prevalencia de la esclerosis múltiple en esas regiones podría ser el acceso a la atención de salud. Otros estudios muestran que quienes emigran antes de los 15 años de edad tienden a adquirir el nivel de riesgo del lugar al que se mudan. Eso puede hacer que su riesgo sea más alto o bajo. Dichos datos indican que las personas expuestas a algún agente ambiental antes de la pubertad tienen mayor probabilidad de tener esclerosis múltiple después. Un conglomerado de casos de esclerosis múltiple es la percepción de que se han producido muchos casos de la enfermedad en un período o lugar específicos. Los conglomerados pueden ofrecer pistas sobre el riesgo ambiental o genético de la enfermedad. Hasta ahora, los estudios de conglomerados no han producido evidencia clara de que un factor en particular cause o active la enfermedad. Los científicos deben realizar más estudios para confirmar todas estas teorías. Vitamina D y la esclerosis múltiple Cada vez más pruebas indican que la vitamina D desempeña un papel importante en la esclerosis múltiple. La vitamina D es un nutriente necesario para la buena salud. La exposición al sol es una fuente natural de vitamina D. Los científicos han identificado un bajo nivel de vitamina D en la sangre como factor de riesgo de esclerosis múltiple. Algunos investigadores consideran que la exposición al sol puede estar relacionada con la esclerosis múltiple. Podría ayudar a explicar por qué las personas con esclerosis múltiple tienden a vivir en las regiones más al norte del planeta. Las personas que viven cerca del ecuador están más expuestas a la luz solar todo el año. Como resultado, tienden a producir más vitamina D de manera natural. Los investigadores piensan que esto apoya la función inmunitaria. Quizá ayude a proteger a las personas contra enfermedades inmunomediadas como la esclerosis múltiple. Están tratando de averiguar si tomar suplementos de vitamina D ayuda a prevenir y controlar la enfermedad. Si tiene preguntas sobre suplementos vitamínicos, consulte con su profesional de salud. Tabaquismo y la esclerosis múltiple Cada vez hay mayor evidencia que indica que el tabaquismo desempeña un papel importante en la esclerosis múltiple. Los estudios demuestran que fumar aumenta el riesgo de la enfermedad y está asociado con casos más graves y avance más rápido. Afortunadamente, las pruebas también indican que dejar de fumar ayuda a reducir el avance de la discapacidad neurológica. Esto sucede si se deja de fumar antes o después del inicio de la esclerosis múltiple. Obesidad y la esclerosis múltiple Varios estudios indican que la obesidad en la niñez y la adolescencia aumenta el riesgo de esclerosis múltiple. Estos estudios destacan un riesgo particular en niñas. Otros estudios muestran que la obesidad en adultos jóvenes también puede contribuir a un mayor riesgo de la enfermedad. En las personas con un diagnóstico de esclerosis múltiple, la obesidad puede contribuir a la inflamación y mayor actividad de la enfermedad. Esto puede incluir recaídas y lesiones detectadas en imágenes de resonancia magnética. Factores infecciosos Los científicos investigan la función de muchos virus y bacterias en la esclerosis múltiple. Entre estos virus y bacterias están: el virus de Epstein-Barr , el virus de herpes humano 6, el moquillo o distemper canino, la neumonía por clamidia y el sarampión. El virus de Epstein-Barr causa la mononucleosis. Ha recibido mucha atención en años recientes. Cada vez más investigaciones muestran que la infección previa con el virus de Epstein-Barr aumenta el riesgo de tener esclerosis múltiple. Esto no significa que la esclerosis múltiple es una enfermedad infecciosa. Sin embargo, virus inactivos pueden contribuir a desencadenar los síntomas y la actividad de la enfermedad. Y si bien los virus que posiblemente contribuyan a la esclerosis múltiple, —como el de Epstein-Barr y el tipo 6 de herpes o HHV-6— son infecciosos, la esclerosis múltiple en sí no lo es. La esclerosis múltiple no es contagiosa.¿La esclerosis múltiple es genética o hereditaria? La esclerosis múltiple no es una enfermedad que se hereda. No se pasa de una generación a otra. Pero las personas pueden heredar un riesgo genético. Esto significa que la esclerosis múltiple no es genética de la misma manera sencilla que lo son el cabello negro o los hoyuelos en las mejillas. En realidad, los investigadores han identificado unos 200 genes que contribuyen un poco al riesgo general de esclerosis múltiple. Los estudios de mellizos han aportado pruebas de que los genes desempeñan alguna función en ella. En la población general, el riesgo de tener esclerosis múltiple es de aproximadamente 1 en 333. En gemelos, si uno tiene esclerosis múltiple, el riesgo de que el otro la tenga es de aproximadamente de 1 en 4. El riesgo de tenerla también aumenta cuando otros familiares de primer grado (padres, hermanos e hijos) tienen esclerosis múltiple, pero mucho menos que en gemelos. Los científicos tratan de entender mejor las formas en que el riesgo genético contribuye a la esclerosis múltiple. Teorías no comprobadas sobre las causas de la esclerosis múltiple Los estudiosos han investigado muchas posibles causas de la esclerosis múltiple, sin producir evidencia de una relación. Estas teorías incluyen: alergias ambientales, exposición a mascotas, exposición a metales pesados: plomo, manganeso y mercurio (incluido el usado en empastes dentales de amalgama) y solventes químicos. Algunas de estas teorías surgieron porque, en algunas personas, los primeros síntomas de esclerosis múltiple se presentaron después de la exposición a algo nuevo en el ambiente. Por lo pronto, vale la pena realizar más estudios para entender si las toxinas y sustancias en el ambiente contribuyen a la esclerosis múltiple y de qué maneras. Si tiene preguntas sobre algo a lo que haya estado expuesto, hágaselas a su profesional de salud. Los científicos no saben con certeza cuál es la causa de la esclerosis múltiple. Piensan que una combinación de factores desencadena la enfermedad. Los estudios respaldan la opinión de que algún factor ambiental podría ser la causa de la esclerosis múltiple en ciertas personas con una combinación específica de genes. El factor desencadenante afecta una combinación específica de genes en esas personas. Los genes portan características heredadas de los padres. Las investigaciones también indican que el origen étnico y la ubicación geográfica desempeñan una función. Para identificar la causa de la esclerosis múltiple, los estudios se enfocan en: immunología - el estudio del sistema inmunitario, epidemiología - el estudio de los patrones de enfermedad en grandes grupos de personas, genética - información sobre genes que quizá funcionen de manera indebida en las personas con esclerosis múltiple y agentes infecciosos - virus que pueden contribuir a la esclerosis múltiple. Un entendimiento de las causas de la esclerosis múltiple acelerará el proceso de descubrir tratamientos más eficaces y, a fin de cuentas, la cura . Lo ideal sería encontrar la manera de prevenir la esclerosis múltiple para comenzar. Factores inmunológicos y la esclerosis múltiple Con la esclerosis múltiple, una respuesta inmunitaria anormal causa inflamación. Esta inflamación daña el sistema nervioso central. En la respuesta inmunitaria anormal participan varios tipos de células. Dos tipos importantes de células inmunitarias son las células T y B: Las células T se activan en el sistema linfático. El sistema linfático es parte del sistema inmunitario. Incluye la médula ósea, el timo y los nódulos linfáticos. Con la esclerosis múltiple, las células ingresan al sistema nervioso central por medio de los vasos sanguíneos. Una vez allí, las células T producen sustancias químicas que causan inflamación y daño. Esto resulta en daño a las fibras nerviosas, la mielina y las células que la producen. La mielina es la capa aislante que recubre los nervios. Las células T también ayudan a activar las células B y hacen que otras células del sistema inmunitario participen en un ataque inmunitario. Los linfocitos T reguladores son un tipo de célula T. Con la esclerosis múltiple, no funcionan debidamente ni suprimen la inflación. Las células T citotóxicas o “asesinas” atacan y destruyen directamente las células con ciertas características. Las células B se activan con la ayuda de las células T. Las células B producen anticuerpos y estimulan otras proteínas. Los anticuerpos son las proteínas que combaten las infecciones o sustancias anormales. Con la esclerosis múltiple, estas causan daño en el sistema nervioso central. Los investigadores continúan buscando otras células y procesos que quizá contribuyan a la esclerosis múltiple. Quieren obtener más información sobre qué activa el sistema inmunitario con la esclerosis múltiple y cómo retrasarlo o detenerlo. Factores ambientales de la esclerosis múltiple Aunque se desconoce la causa de la esclerosis múltiple, estamos averiguando más sobre los factores ambientales que contribuyen al riesgo de tener la enfermedad. No existe un solo factor de riesgo que provoque la esclerosis múltiple. Los investigadores creen que varios factores contribuyen al riesgo general. Factores geográficos y la esclerosis múltiple El diagnóstico de esclerosis múltiple es más frecuente en las regiones más alejadas del ecuador. Para entender por qué, los epidemiólogos analizan muchos factores. Los epidemiólogos son científicos que estudian los patrones de enfermedad en grupos numerosos de personas. Observan variaciones en: Por ejemplo, un estudio indica que la explicación de la mayor prevalencia de la esclerosis múltiple en esas regiones podría ser el acceso a la atención de salud. Otros estudios muestran que quienes emigran antes de los 15 años de edad tienden a adquirir el nivel de riesgo del lugar al que se mudan. Eso puede hacer que su riesgo sea más alto o bajo. Dichos datos indican que las personas expuestas a algún agente ambiental antes de la pubertad tienen mayor probabilidad de tener esclerosis múltiple después. Un conglomerado de casos de esclerosis múltiple es la percepción de que se han producido muchos casos de la enfermedad en un período o lugar específicos. Los conglomerados pueden ofrecer pistas sobre el riesgo ambiental o genético de la enfermedad. Hasta ahora, los estudios de conglomerados no han producido evidencia clara de que un factor en particular cause o active la enfermedad. Los científicos deben realizar más estudios para confirmar todas estas teorías. Vitamina D y la esclerosis múltiple Cada vez más pruebas indican que la vitamina D desempeña un papel importante en la esclerosis múltiple. La vitamina D es un nutriente necesario para la buena salud. La exposición al sol es una fuente natural de vitamina D. Los científicos han identificado un bajo nivel de vitamina D en la sangre como factor de riesgo de esclerosis múltiple. Algunos investigadores consideran que la exposición al sol puede estar relacionada con la esclerosis múltiple. Podría ayudar a explicar por qué las personas con esclerosis múltiple tienden a vivir en las regiones más al norte del planeta. Las personas que viven cerca del ecuador están más expuestas a la luz solar todo el año. Como resultado, tienden a producir más vitamina D de manera natural. Los investigadores piensan que esto apoya la función inmunitaria. Quizá ayude a proteger a las personas contra enfermedades inmunomediadas como la esclerosis múltiple. Están tratando de averiguar si tomar suplementos de vitamina D ayuda a prevenir y controlar la enfermedad. Si tiene preguntas sobre suplementos vitamínicos, consulte con su profesional de salud. Tabaquismo y la esclerosis múltiple Cada vez hay mayor evidencia que indica que el tabaquismo desempeña un papel importante en la esclerosis múltiple. Los estudios demuestran que fumar aumenta el riesgo de la enfermedad y está asociado con casos más graves y avance más rápido. Afortunadamente, las pruebas también indican que dejar de fumar ayuda a reducir el avance de la discapacidad neurológica. Esto sucede si se deja de fumar antes o después del inicio de la esclerosis múltiple. Obesidad y la esclerosis múltiple Varios estudios indican que la obesidad en la niñez y la adolescencia aumenta el riesgo de esclerosis múltiple. Estos estudios destacan un riesgo particular en niñas. Otros estudios muestran que la obesidad en adultos jóvenes también puede contribuir a un mayor riesgo de la enfermedad. En las personas con un diagnóstico de esclerosis múltiple, la obesidad puede contribuir a la inflamación y mayor actividad de la enfermedad. Esto puede incluir recaídas y lesiones detectadas en imágenes de resonancia magnética. Factores infecciosos Los científicos investigan la función de muchos virus y bacterias en la esclerosis múltiple. Entre estos virus y bacterias están: el virus de Epstein-Barr , el virus de herpes humano 6, el moquillo o distemper canino, la neumonía por clamidia y el sarampión. El virus de Epstein-Barr causa la mononucleosis. Ha recibido mucha atención en años recientes. Cada vez más investigaciones muestran que la infección previa con el virus de Epstein-Barr aumenta el riesgo de tener esclerosis múltiple. Esto no significa que la esclerosis múltiple es una enfermedad infecciosa. Sin embargo, virus inactivos pueden contribuir a desencadenar los síntomas y la actividad de la enfermedad. Y si bien los virus que posiblemente contribuyan a la esclerosis múltiple, —como el de Epstein-Barr y el tipo 6 de herpes o HHV-6— son infecciosos, la esclerosis múltiple en sí no lo es. La esclerosis múltiple no es contagiosa.¿La esclerosis múltiple es genética o hereditaria? La esclerosis múltiple no es una enfermedad que se hereda. No se pasa de una generación a otra. Pero las personas pueden heredar un riesgo genético. Esto significa que la esclerosis múltiple no es genética de la misma manera sencilla que lo son el cabello negro o los hoyuelos en las mejillas. En realidad, los investigadores han identificado unos 200 genes que contribuyen un poco al riesgo general de esclerosis múltiple. Los estudios de mellizos han aportado pruebas de que los genes desempeñan alguna función en ella. En la población general, el riesgo de tener esclerosis múltiple es de aproximadamente 1 en 333. En gemelos, si uno tiene esclerosis múltiple, el riesgo de que el otro la tenga es de aproximadamente de 1 en 4. El riesgo de tenerla también aumenta cuando otros familiares de primer grado (padres, hermanos e hijos) tienen esclerosis múltiple, pero mucho menos que en gemelos. Los científicos tratan de entender mejor las formas en que el riesgo genético contribuye a la esclerosis múltiple. Teorías no comprobadas sobre las causas de la esclerosis múltiple Los estudiosos han investigado muchas posibles causas de la esclerosis múltiple, sin producir evidencia de una relación. Estas teorías incluyen: alergias ambientales, exposición a mascotas, exposición a metales pesados: plomo, manganeso y mercurio (incluido el usado en empastes dentales de amalgama) y solventes químicos. Algunas de estas teorías surgieron porque, en algunas personas, los primeros síntomas de esclerosis múltiple se presentaron después de la exposición a algo nuevo en el ambiente. Por lo pronto, vale la pena realizar más estudios para entender si las toxinas y sustancias en el ambiente contribuyen a la esclerosis múltiple y de qué maneras. Si tiene preguntas sobre algo a lo que haya estado expuesto, hágaselas a su profesional de salud.